jueves, 14 de agosto de 2008

Editorial: Por qué dejar para el tres de otoño…

Por Marcela Varela
¡Si lo puedes comenzar, hoy! Hace un tiempo atrás, Lola le regaló a su hermana un multiejercitador cuya cinta de caminar sólo recorrió dos cuadras; los remos sólo remaron de vereda a vereda, y la bicicleta sólo pedaleó de esquina a esquina. Además de convertirse en perchero por unos cuantos meses, fin este último, que determinó que lo obsequiaran a quien le diera mejor uso.
El otro día, Lola comentó que se compró de segunda mano, una bicicleta fija en perfecto estado, pero que todavía no dio ninguna pedaleada, ¿cuánto tiempo tardará Lola, en regalarla?
Muchas veces, el proponernos metas que no se adaptan al ritmo de vida que llevamos hace que, casi siempre, fracasemos en su concreción.
Es interesante tomar la dirección de nuestra vida y diseñar un esquema de metas a lograr, sin que esto se convierta en una estructura rígida que nos provoque malestar e insatisfacción.
Sin embargo, el abarcar según nuestras posibilidades no tiene que generarnos angustia, sino todo lo contrario. Angustiante es el fracaso que conlleva no tener en cuenta nuestras propias limitaciones y perseverar en algo que por el momento, es irrealizable.
Se preguntarán el por qué de la introducción para terminar hablando de todo esto. Porque es el ejemplo más cotidiano que todas conocemos. Cada otoño, se renueva el anhelo de comenzar en primavera, con la rutina de ejercicios que nos dejará ¡divinas! para lucir el traje de baño, sin culpa, durante el próximo verano. ¡Ni qué hablar de las dietas!
Y así, cada una de nosotras de acuerdo a su propio bagaje irá listando sus cosas pendientes: estudios sin finalizar, amistades por visitar, consultas médicas por hacer, idas a la peluquería para un cambio de look, entre otras.
Mujeres, a ver, el día tiene 24 horas. Entre el trabajo, la casa, los niños, la pareja, las mascotas, las compras, (Uf! Ya estoy agotada) Imposible, el mismo día, después de todo esto: ir a la peluquería, visitar al médico, hacer gimnasia, estudiar, ir de shopping, visitar a nuestros amigos…Los días de la semana son siete, entonces,¡organicémonos!
Y hagamos un poco cada día, de lo contrario terminaremos al borde de un ataque de nervios o como se dice ahora, “estresadas”…

2 comentarios:

  1. ajajjajaja es tal cual. yo no escribo nada acerca de PERCHE-GYM.... por que si no.... "LOLA" me va a pegarrrrrr!!!!!

    ResponderEliminar