Octubre Mes de la Prevención del Cáncer de Mama

Es una afección que afecta a 1 de cada 8 mujeres en el mundo. El cáncer de mamas es el más común de los cánceres femeninos.
Ante esta realidad su detección temprana a través de exámenes clínicos, auto-exámenes y mamografías resulta fundamental. Sirve para atacar la enfermedad en sus etapas iniciales y aumentar así las posibilidades de supervivencia o mejorar la calidad de vida de quienes la padecen.

La gran mayoría de las mujeres que son diagnosticadas con cáncer de mama logra sobrevivir y aunque las estadísticas son alentadoras, esto no es suficiente para disipar los temores que surgen en el momento de enfrentar el diagnóstico. Por esta razón muchas mujeres son renuentes a realizarse los exámenes que detecten o descarten la enfermedad, aun sabiendo que si la atacan a tiempo, tienen amplias posibilidades de salvar su vida.


Datos a tener en cuenta

1. El 70% de los cánceres de mama son detectados por auto examen, sin embargo no todos los cánceres se detectan por palpación, por lo que se recomienda mamografías en forma regular y auto examen mensual.
2. 8 de cada 10 nódulos de la mama, no son cánceres. Si usted detecta un bulto, no tema, consulte a su médico.
3. La mamografía es un estudio con baja dosis de rayos x que permite detectar un nódulo antes de que sea palpable.
4. Cuando un cáncer de mama es detectado tempranamente, la sobrevida aumenta.
5. Si bien el antecedente de cáncer de mama en familiares es un dato importante, no olvide que la gran mayoría de ellos son diagnosticados en mujeres sin antecedentes familiares, por lo que todas las mujeres deben controlarse.
   

Cada dos minutos se diagnostica un cáncer de mama en el mundo.


Recuerde

• Auto examine sus mamas.
• Consulte a su médico una o dos veces al año.
• Hágase mamografías anualmente partir de los 40 años o antes si tuviese familiares con cáncer de mama.
  
• Una dieta baja en grasas, actividad física regular y no beber alcohol le ayudarán a disminuir sus riesgos.

Cómo realizarse el auto examen

Párese frente a un espejo con los brazos al costado del cuerpo. Preste atención a la forma y tamaño de sus mamas, compárelos. Es común tener un pecho más grande que otro. Observe sus aréolas y pezones en posibles tironeamientos, retracciones o descamación. Luego fíjese en la piel, observe si hay cambios de textura y color. Realice la misma operación con los brazos en alto.

Recuerde que cierta nodularidad de la mama es normal. El autoexamen le ayudará a familiarizarse con la textura normal de sus senos. Acostada, palpe su pecho derecho con su mano izquierda. Coloque su brazo detrás de la cabeza. Deslice el pulpejo de sus dedos de la periferia al centro de su mama sin olvidar ningún sector. Luego palpe la zona del pezón.

Preste atención si existiera derrame por los mismos, recuerde que a la presión puede existir una pequeña gota, sólo debe darle importancia si es espontánea, especialmente si el aspecto es sanguinolento. Note también si existiese algún tipo de descamación o eczema del pezón. Realice la misma operación con la otra mama. No olvide palpar sus axilas.

Asimetrías, enrojecimientos, retracciones del pezón o nódulos son los principales elementos a buscar durante el auto examen. Este debe realizarse una vez al mes, entre 6 y 7 días después de la menstruación, momento en que la mama está en reposo.
Las mujeres que ya han entrado en su menopausia pueden practicárselo en cualquier momento.